Morgana le Fay, la medio hermana del rey Arturo, era una mujer oscura, atractiva y apasionada, llena de crueldad y ambición. Cuando era joven aprendió a dominar la magia negra y la nigromancia en un convento.
Desde que Arturo fuera coronado rey, Morgana ansiaba su trono y ya había intentado, sin éxito en dos ocasiones, asesinar a su propio hermanastro.
Temerosa de la venganza de Arturo, se dirigió a las tierras que poseía en el país de Gore y, encerrada en su inexpugnable castillo, planeaba, junto a tres reinas hechiceras, la forma de acabar con Arturo.
Uno de sus maléficos planes consistió en robar Excalibur. Por si esto fuera poco, Sir Lancelot, uno de los caballeros más esforzados de Arturo, cayó preso de las brujas, quienes le mantuvieron cautivo en una oscura mazmorra del castillo preparándole un amargo final.
Sir Ewain, el propio hijo de Morgana y sobrino del rey, junto a la hechicera Nyneve, que no tenía en gran estima a Morgana, decidieron recuperar Excalibur y rescatar a Sir Lancelot de las mazmorras del castillo. No estaban solos, unos amigos extranjeros de Sir Ewain les acompañaban en su aventura...
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